Mucho antes de que salga el sol y se consuma la noche, los panaderos artesanos trabajan con sus propias manos el pan que al día siguiente estará en la mesa de muchos hogares gallegos. Son auténticos maestros panaderos, con generaciones en el saber hacer apoyando su esfuerzo diario.
Este pan, elaborado con los mejores ingredientes autóctonos de la tierra gallega, cuenta con una alta hidratación y, por lo tanto, un alveolado espectacular y gran ligereza de la miga.
A pesar de que el aroma del pan gallego artesano es inconfundible, la osadía de la industria hace que sea más habitual de lo deseado encontrar en diversos establecimientos “un pan” bajo dicha denominación, que tan sólo puede presumir de nombre que no es suyo.
Conscientes de esta problemática muchos de los panaderos del sector, junto con las pertinentes instituciones gallegas, estamos tramitando la Indicación Geográfica Protegida del Pan Gallego. Para que más allá de las fronteras de Galicia el pan gallego continúe siendo el pan de calidad de siempre, con su aroma y sabor inconfundibles.
El aroma del pan gallego artesano, el mejor!